Ezequiel: Todo vuelve.

Hace una semana me encontré en el tren con Ezequiel.
Ezequiel es un joven ciego- sordo con lenguaje adquirido ya que perdió la audición en la adolescencia.
Por lo tanto su lenguaje es buenísimo y con un buen equipamiento su comunicación está viento en popa.
Ezequiel presenta el Sindrome de Norris.
Se nace ciego y se pierde la audición en la adolescencia.
Ezequiel recibe audifonos en marzo de 2002 , ni bien empecé este proyecto.
Luego de 4 años lo veo y por supuesto que tuve que acercarme y preguntarle si era Ezequiel.
Ni bien le hablé, reconoció mi voz y me dijo: "Marcela, tanto tiempo, me viste!".
Charlamos en nuestro viaje, luego lo acerqué con un taxi a una pizzería donde se encontraba con una amiga ciega y la ayudaba a resolver un problema.
¿Cuál era el problema?
En San Fernando, en una casa de articulos del hogar no quisieron venderle una heladera en cuotas por ser ciega.
Entonces Ezequiel se ofreció en acompañarla a otro negocio donde él pudo comprar un equipo de música a pesar de su ceguera.
Ezequiel me contaba esta historia indignado.
Él cuenta lo dificil que es que te tengan en cuenta en esta sociedad .
Él me dice:"Como sé que La Tierra es redonda, todo vuelve."
Su frase me quedó dando vueltas en mi cabeza unos cuantos días.
Ezequiel es profesor de computación en ciegos y trabaja en Centro Rousell en San Isidro.
Lo admiré por su coraje , valentía y ganas de progresar frente a todo obstáculo.
¡Cuánto aprendí en un corto viaje en tren y taxi!

La Hermana Luisa.

Hoy le dí audifono a una monja, la Hna Luisa de la Iglesia Nuestra Sra de la Misericordia en Villa Devoto.
Luisa vino con su hermana María.
Ambas formadas en Letras y esto se notaba en su hablar y su vocabulario.
Luisa se emocionó cuando le entregué su audifono.
Ella me regaló un rosario traído del Vaticano y bendecido por El Papa Benedetto XVI y una hermosa carta.
Ella me dice:" ¿ Qué puedo hacer por vos?"
Le contesté: " Rezar para que más niños sordos reciban audifonos y terapia a tiempo.
Como también la pedí que rece por los abuelos que se encuentran desconectados en el mundo del silencio."
Una historia más.
La hna Luisa me invitó a tomar el té en su convento.
Prometo que iré.